La exposición al DDT altera el epigenoma del esperma humano

9 feb 2024 Universidad McGill

En un estudio que señala posibles complicaciones reproductivas y de salud en los seres humanos, ahora y para las generaciones futuras, investigadores de la Universidad McGill, la Universidad de Pretoria, la Universidad Laval, la Universidad de Aarhus y la Universidad de Copenhague han llegado a la conclusión de que los padres expuestos a toxinas ambientales, en particular al DDT, pueden producir esperma con consecuencias para la salud de sus hijos.

El proyecto de investigación, de una década de duración, examinó el impacto del DDT en el epigenoma del esperma de hombres vhavenda sudafricanos e inuit groenlandeses, algunos de los cuales viven en el norte de Canadá.

El estudio, publicado en la revista Environmental Health Perspectives, demuestra una relación entre la exposición prolongada al DDT y los cambios en el epigenoma del esperma. Estos cambios, sobre todo en genes vitales para la fertilidad, el desarrollo embrionario, el neurodesarrollo y la regulación hormonal, se corresponden con mayores tasas de defectos congénitos y enfermedades, incluidos trastornos del neurodesarrollo y metabólicos.

"Identificamos regiones del epigenoma del esperma que están asociadas con los niveles séricos de DDE (sustancias químicas que se forman cuando se descompone el DDT) y esta asociación sigue una tendencia dosis-respuesta. Creo que es bastante sorprendente, ya que cuanto mayor es la exposición al DDE, mayores son los defectos de la cromatina o de la metilación del ADN en el esperma", afirma la doctora Ariane Lismer, autora principal del estudio, que realizó el trabajo mientras cursaba su doctorado en el Departamento de Farmacología y Terapéutica de McGill.

"Demostramos que la respuesta del epigenoma espermático a la exposición a toxinas puede estar relacionada con enfermedades en la siguiente generación", afirmó la doctora Sarah Kimmins, que dirigió la investigación como catedrática de Farmacología y Terapéutica en McGill y ahora también es profesora en el Departamento de Patología y Biología Celular de la Universidad de Montreal. "Se trata de un nuevo paso fundamental para este campo porque, aunque hay muchos estudios en animales que demuestran los efectos de las toxinas en el epigenoma del esperma, los estudios en humanos no lo han demostrado de forma exhaustiva".

Malaria, cambio climático y el "efecto saltamontes

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A pesar de la prohibición mundial del DDT para proteger a los seres humanos y el medio ambiente de sus efectos, el gobierno sudafricano tiene un permiso especial para utilizarlo como insecticida para controlar la malaria. En algunas zonas, el interior de las viviendas está recubierto con la toxina. Las conclusiones del estudio subrayan la urgencia de encontrar formas alternativas de controlar la malaria y otras enfermedades transmitidas por vectores.

La realidad es que la gente, especialmente los niños pequeños y las mujeres embarazadas, siguen muriendo de paludismo. No podemos permitirnos que los habitantes de las regiones donde el paludismo es endémico se nieguen a fumigar sus casas, ya que aumentará su riesgo de contraer la enfermedad."

Tiaan de Jager, Doctor, Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud y Catedrático de Salud Medioambiental en la Escuela de Sistemas de Salud y Salud Pública de la Universidad de Pretoria.

Además, el número de personas y animales expuestos al DDT está aumentando debido al cambio climático. El DDT puede viajar grandes distancias a través de lo que se conoce como "efecto saltamontes", evaporándose con el aire caliente y volviendo a la Tierra con la lluvia y la nieve en las regiones más frías, donde persiste en la cadena alimentaria del Ártico.

Repensar el papel del padre en el desarrollo infantil

Los resultados también ponen de relieve la importancia de tener en cuenta a los padres en los debates sobre la salud y el desarrollo infantil. Si bien es sabido que las mujeres deben evitar la exposición a contaminantes ambientales durante el embarazo, se ha prestado menos atención a cómo afectan las toxinas a los padres.

"Tendemos a pensar que lo único que tienen que hacer los padres es fecundar. Pero olvidamos que la mitad del genoma y el epigenoma proceden del padre y la otra mitad de la madre. Lo que ese epigenoma hace en el desarrollo embrionario es fundamental para el desarrollo normal", afirma la coautora del estudio, la doctora Janice Bailey, ex catedrática de Ciencias Animales de la Universidad Laval y ahora Directora Científica del Fondo de Investigación de Quebec en Naturaleza y Tecnologías (FRQNT).

Aunque el estudio se centra en la exposición al DDT, los investigadores afirman que no es aventurado sugerir que la exposición a disruptores endocrinos domésticos más comunes, como los que se encuentran en cosméticos y artículos de cuidado personal, puede actuar de forma similar.

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