Secuelas tras un aborto
Como hemos comentado en otras ocasiones al hablar de las secuelas tras un aborto, éstas, al igual que el tratamiento y el tiempo de recuperación van a depender, por supuesto, de cada mujer, pero, sobre todo, de las razones y circunstancias en las que se ha producido.
Cuando el aborto se ha producido de forma voluntaria, los especialistas hablan del síndrome post aborto. Hace referencia a un enorme conflicto personal que aparece cuando la mujer comienza a tomar conciencia de la dimensión de su decisión y de la responsabilidad de la misma. Aunque es la mujer la sufre el aborto físicamente, este síndrome afecta también a la pareja, y suele ocasionar una gran sensación de vacío y desesperanza.
Embarazo tras un aborto espontáneo
Tratamiento psicológico tras un aborto
Otra de las secuelas que también aparece cuando se ha perdido un bebé es el sentimiento de culpa, independientemente de que el aborto haya sido espontáneo o voluntario. Aunque la mayoría de los abortos espontáneos que se producen no pueden prevenirse ni controlarse, muchas mujeres no dejan de torturarse pensando que tal vez hicieron algo que lo provocó y este sentimiento puede llegar incluso a desembocar en una depresión. En el caso de los abortos voluntarios, aunque la decisión haya sido tomada, también puede aparecer el sentimiento de culpa pasado un breve tiempo.
En definitiva, un aborto es una experiencia traumática y difícil de superar que puede traer consigo otras consecuencias o secuelas negativas que pueden llegar a afectar a las relaciones sexuales. Algunas mujeres sienten mucho miedo después de haber sufrido un aborto y tardan un tiempo en volver a disfrutar del sexo, especialmente, cuando están buscando de nuevo un bebé.
En cualquier caso, las secuelas del aborto, van a depender de si éste fue voluntario o espontáneo, del apoyo que tenga la mujer en ese momento y de las circunstancias personales de cada persona.