Una mirada rápida a la infertilidad

La infertilidad se produce cuando una mujer no puede quedarse embarazada o no lo consigue después de mantener relaciones sexuales regulares y sin protección durante más de un año.

Las causas pueden provenir del hombre, de la mujer o de una combinación de factores masculinos y femeninos que interfieren en el embarazo de la mujer.

Las pruebas de fertilidad implican a ambos miembros de la pareja y comienzan con un examen físico exhaustivo. También puede incluir un análisis de semen para los hombres. En el caso de la mujer, pueden solicitarse pruebas de laboratorio y estudios de imagen.

Las opciones de tratamiento para las parejas e individuos que se enfrentan a la infertilidad pueden ir desde cambios en el estilo de vida hasta técnicas de reproducción asistida, como medicamentos, inseminación intrauterina o fecundación in vitro (FIV).

¿Qué es la infertilidad?

La infertilidad se define como la imposibilidad de quedarse embarazada a pesar de mantener relaciones sexuales regulares y sin protección durante al menos 12 meses (seis meses si la mujer es mayor de 35 años). Aproximadamente entre el 10 y el 15% de las parejas de Estados Unidos padecen infertilidad.

Tanto los hombres como las mujeres pueden tener factores que causen infertilidad, o una combinación de factores masculinos y femeninos puede causarla. Aproximadamente un tercio de las veces no se encuentra ninguna explicación para la infertilidad, lo que se denomina infertilidad inexplicada.

La infertilidad de las mujeres puede estar relacionada con problemas de ovulación, hormonales o de los órganos reproductores. Los hombres suelen tener problemas con la cantidad y la salud de sus espermatozoides.

La edad también puede influir en la infertilidad. Las mujeres nacen con un número determinado de óvulos y no pueden fabricar más durante su vida. Cada mes se utiliza un óvulo durante el ciclo menstrual.

Las parejas más jóvenes y sanas tienen un 20% de posibilidades de embarazo durante cualquier ciclo menstrual. A medida que la mujer entra en la treintena, ese porcentaje empieza a disminuir, y se reduce aún más rápidamente cuando la mujer llega a los 37 años. Las posibilidades de fertilidad de los hombres también disminuyen con la edad, pero no de forma tan previsible.

Los factores del estilo de vida pueden afectar a la infertilidad. En el caso de las mujeres, el sobrepeso o la falta de peso pueden influir en los problemas de infertilidad. Fumar tabaco o beber alcohol, de forma moderada o excesiva, también puede dificultar que una mujer se quede embarazada.

En el caso de los hombres, la obesidad, el consumo de tabaco o marihuana, el consumo excesivo de alcohol o el uso de esteroides anabólicos pueden reducir la cantidad y la calidad de los espermatozoides, lo que provoca infertilidad. Algunas condiciones médicas también pueden afectar a la fertilidad.

Cuándo buscar pruebas de fertilidad

Nuestros médicos ayudan a nuestros pacientes a evaluar su fertilidad. Si es necesario, también podemos remitir a los pacientes a un especialista en infertilidad, un médico especialista en endocrinología reproductiva e infertilidad. Es el momento de considerar la posibilidad de acudir a un médico para una evaluación de la infertilidad si se da alguna de las siguientes circunstancias:

  • Después de un año de relaciones sexuales regulares sin métodos anticonceptivos la mujer no está embarazada (seis meses si la mujer es mayor de 35 años)
  • Más de 40 años
  • Ciclo menstrual irregular
  • Haber experimentado múltiples abortos espontáneos
  • Si alguno de los dos se ha sometido a un tratamiento contra el cáncer
  • Si la pareja tiene problemas de fertilidad conocidos
  • La mujer ha sido diagnosticada de enfermedad inflamatoria pélvica o endometriosis
  • Los testículos del hombre son pequeños o hay hinchazón en el escroto (varicocele).

¿Se aplica alguna de las afirmaciones anteriores a usted o a su pareja?

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Diagnóstico de la infertilidad

Durante la evaluación de la infertilidad de una mujer, los médicos de CU Medicine OB-GYN East Denver (Rocky Mountain) tratarán de determinar la causa de la infertilidad, comenzando con una historia clínica y un examen ginecológico. Las pruebas adicionales de infertilidad pueden incluir:

Pruebas de laboratorio

  • La medición de la temperatura corporal basal consiste en el seguimiento de la temperatura corporal de la mujer para determinar si se ha producido la ovulación. Para realizar esta prueba, la mujer deberá tomarse la temperatura por vía oral cada mañana antes de levantarse de la cama.
  • Los kits de predicción de la ovulación pueden adquirirse sin receta médica. Las mujeres utilizan estos instrumentos para saber cuándo van a ovular.
  • La prueba de la progesterona consiste en tomar una muestra de sangre el día 21 del ciclo menstrual. La prueba medirá el nivel de progesterona, y un nivel elevado indica que la mujer ha ovulado.
  • Los niveles de prolactina se analizan mediante una muestra de sangre. Los niveles elevados de la hormona prolactina pueden interrumpir la ovulación.
  • La prueba de la función tiroidea se realiza mediante un análisis de sangre. Los problemas de la función tiroidea se han relacionado con problemas de infertilidad.
  • El análisis de orina puede determinar si la mujer está ovulando o cuándo lo hace. La prueba detecta la hormona luteinizante (LH) en la orina de la mujer. La HL activa la liberación de un óvulo.

Pruebas de imagen

  • La histerosalpingografía (HSG), también conocida como tubograma, es una serie de radiografías del útero y las trompas de Falopio que se toman después de introducir un tinte líquido a través de la vagina. Esto ayudará al médico a determinar si las trompas de Falopio están bloqueadas o si hay algún defecto en el útero.
  • La histeroscopia ofrece al médico una buena visión de los posibles problemas al introducir en el útero un tubo fino y flexible con una cámara en el extremo. Además de ver cualquier anomalía, el médico puede tomar muestras del tejido si es necesario, así como corregir ciertos problemas.
  • La laparoscopia es una cirugía mínimamente invasiva en la que el médico introduce un fino dispositivo de visualización e instrumentos operativos a través de una pequeña incisión en el bajo vientre de la mujer. Este procedimiento puede identificar irregularidades u obstrucciones de las trompas de Falopio, endometriosis, cicatrices u otros problemas del útero y los ovarios. También puede corregir esos problemas cuando sea necesario.
  • La ecografía transvaginal se realiza en los días siguientes a la finalización del periodo. Un ginecólogo-obstetra colocará un pequeño aparato de ultrasonidos en la vagina y lo acercará a los órganos pélvicos. Las ondas sonoras de la ecografía proporcionarán imágenes de los ovarios y el útero para que el médico las revise. El médico también puede decidir incluir una solución salina en la ecografía transvaginal para aumentar la calidad de la imagen, lo que se denomina sonohisterografía (SHS).

En la mayoría de los casos, todas las pruebas necesarias pueden realizarse en unos pocos ciclos menstruales. Un ginecólogo-obstetra también puede pedir un análisis de semen para que el hombre evalúe su esperma.

Si se encuentra una causa, se discutirán las opciones de tratamiento. No todos los casos de infertilidad pueden relacionarse con un problema específico, lo que se define como infertilidad inexplicable, pero los pacientes siguen teniendo opciones de tratamiento.

Opciones de tratamiento para la infertilidad

Las opciones de tratamiento varían en función de múltiples factores. Algunos de los tratamientos disponibles para la infertilidad son:

  • Cirugía para restablecer la fertilidad, como la extirpación de pólipos endometriales o la corrección de problemas anatómicos
  • Estimular la ovulación con medicamentos para la fertilidad, que es la opción de tratamiento más común para las mujeres infértiles debido a un trastorno de la ovulación. Estos medicamentos pueden presentarse en forma de píldora o de inyección y ayudan a regular o inducir la ovulación.
  • La inseminación intrauterina (IIU) consiste en colocar espermatozoides sanos directamente en el útero en el momento en que el ovario de la mujer libera el óvulo.
  • La FIV consiste en fecundar los óvulos extraídos de la mujer con el esperma de un varón en una placa de laboratorio e implantar el embrión o embriones resultantes en el útero.
  • La inyección intracitoplasmática de esperma (ICSI) durante la FIV inyecta el esperma directamente en un óvulo maduro
  • Óvulos o esperma de donante
  • Portadora gestacional o madre de alquiler para llevar un embarazo.

Los ginecólogos-obstetras no pueden realizar tratamientos avanzados de infertilidad. Si es necesario, le remitiremos a un endocrino reproductivo y a un especialista en infertilidad.

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